Reflexión: La oración es una herramienta poderosa que nos conecta con Dios y nos da la oportunidad de hablar con él y pedirle ayuda. En Lucas 18, Jesús nos dice que debemos orar siempre y no desmayar, lo que significa que debemos hacer de la oración una prioridad en nuestras vidas y no dejar de orar, incluso cuando las cosas parezcan difíciles. La oración nos da la oportunidad de expresar nuestras necesidades y preocupaciones a Dios y de confiar en él para guiarnos y bendecirnos. Así que hoy, toma un tiempo para orar y dejar que Dios hable contigo. Confía en que él te escuchará y te guiará.
Tiempo de orar: Padre celestial, gracias por tu amor y tu presencia constante en nuestras vidas. Ayúdanos a tomar tiempo cada día para orar y hablar contigo. Ayúdanos a confiar en tu guía y tu dirección en todo momento. En el nombre de Jesús, oramos. Amén.