17Oct | Vestidos, nunca desnudos

Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. (Efesios 6:11)

¿Se imagina vivir en el Polo Norte y caminar por las calles sin ropa? Para la mayoría esta es una idea totalmente absurda. Vestirnos es indispensable para la vida, especialmente en bajas temperaturas. En el ámbito espiritual, muchos viven desnudos y por lo tanto son más vulnerables al frío espiritual, a los ataques de las tinieblas, a la invitación de los deseos pecaminosos.

El apóstol Pablo enseñó a los efesios que cada hijo de Dios debe arroparse de aquellos elementos que les han sido provistos para su defensa ante tales ataques. 

Vestíos de toda la armadura. En esta frase Pablo nos habla en tono de orden, de mandato. No solicita nuestra 'voluntariedad', el solo se limita a establecer un comando a ejecutar. Dios conoce los peligros tremendos que rodean a sus hijos y es por ello que nos alerta, ordenándonos, a tomar el correcto rumbo. 

No se trata de vivir solo con parte de la armadura de Dios. Pablo lo dejó claro: 'toda la armadura'. Si leemos el contexto en estos versos, podemos saber que entre la armadura se encuentran: casco de la salvación, coraza de justicia, la espada del Espíritu, cinturón de la Verdad, el escudo de la fe, el Evangelio de la Paz. Todas estas son parte de una armadura que es un sistema. Cuando dejas de usar una parte el resto se ve afectada y queda vulnerable tu alma a los ataques de satanás. 

Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; (Efesios 6:14-17)

Por otra parte Dios nos enseña que sí tendremos asechanzas. Es por ello que ante tal alerta de nuestro Padre debemos prepararnos para cuando llegue ese día, entonces podamos estar firmes.

Aprovechemos este día para ir vistiéndonos con cada parte de la armadura de Dios. No te quedes desnudo en medio del Polo Norte 'espiritual', porque puedes congelarte, alejarte de Dios. Es imprescindible que hoy nos arropemos de tal armadura y estar protegidos y firmes de cara a las tentaciones que hoy tendremos. 

Tiempo de Orar

Padre amado, te agradezco porque me amas tanto que me aconsejas a tomar toda tu armadura. Hoy me dispongo a usar toda la armadura que me explicas en tu Palabra. Ayúdame a ser fiel en vivir vestido de tu armadura de modo que cuando llegue el enemigo a mi vida, yo pueda permanecer firme y seguro en ti. En el Nombre de Jesús, Amén. 

Si este devocional ha sido de bendición y edificación a tu vida te animo a compartir y dejar tu comentario aquí abajo.