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Reflexión: La obediencia es una parte crucial de nuestra relación con Dios y nos muestra cuánto le amamos. Como dice Jesús en Juan 14, si realmente le amamos, debemos guardar sus mandamientos. Esto no significa que debamos tratar de ganar su aceptación mediante nuestras propias acciones, sino que debemos mostrar nuestro amor por él al obedecer sus palabras y seguir sus enseñanzas. La obediencia nos permite vivir de acuerdo con su voluntad y su plan para nuestras vidas y nos da la paz y la alegría que solo él puede dar. Así que hoy, busca obedecer a Dios y demostrar tu amor por él.
Tiempo de orar: Padre celestial, gracias por tu amor y tu guía en nuestras vidas. Ayúdanos a obedecer tus mandamientos y a seguir tus enseñanzas. Ayúdanos a demostrar nuestro amor por ti y a vivir de acuerdo con tu voluntad. En el nombre de Jesús, oramos. Amén.
